El plan de la villana Roxanne – Capítulo 13.5: La fiesta, el príncipe y ninguna Cenicienta (3)

Escrito por Polly

Asesorado por Grainne

Editado por Shiro

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POV George

No veía la hora de poder marcharme de esta fiesta de niñas, sólo había puras mujeres hablando como cotorras y chiquillas que gritaban con fuerza alrededor del jardín. Seguramente la mujeres aquí estaban para poder presumir de sus hijas, de sus riquezas, ropas, joyas; aquí todos eran falsos… y sus hijas no eran mejores, queriendo todas impresionar a los pocos chicos presentes, sobre todo al príncipe

Pero ella es diferente…

Mi hermana pequeña era distinta a todas estas molestias, ella no buscaba nada de lo que estas niñas sí. Ella era inocente, y no estaba acostumbrada a la verdadera naturaleza de las personas.

 —Tengo que llevarla a casa…

Ya habíamos pasado suficiente tiempo en esta fiesta, Roxanne había sido llevada adentro porque empezó a sentirse mal. Quizás estaba muy nerviosa frente a tanta gente, y jamás había estado tan lejos de casa sin padre presente.

De igual manera estoy yo para poder cuidarla.

Moví mis piernas lo más rápido posible a través de la multitud para poder entrar a través de la única puerta del palacio abierta, allí donde mi hermana descansaba con la niña de la familia Erns. Pero, frené de golpe al darme cuenta de alguien que miraba con impacto hacia adentro, era el príncipe.

¿Qué le pasa?

Con rapidez, mis piernas comenzaron a moverse, y la ira empezó a acumularse dentro de mis venas al ver cómo mi hermana estaba siendo abrazada por la señorita Kalie mientras que Francis se interponía entre ellas y un grupo de tres pequeños ogros con vestidos, quienes lucían pálidas como si hubieran visto un fantasma. No era para menos, el rostro del caballero se había distorsionado en algo aterrador.

Pasando junto al príncipe Maximillian como si fuera una parte más de la decoración, corrí junto a mi hermana para tirar de su brazo, observando en ese momento cómo su tierno rostro tenía ahora una mejilla roja. Sus ojos estaban ligeramente confundidos, pero el verme sé que la tranquilizó, ya que su pequeño cuerpo se apoyó contra el mío.

—¿Qué es lo que esta pasando aquí?

—Se-Señor George, esas muchachas insultaron a la señorita Roxanne y dijeron que era la hija de una mujerzuela… ¡Y luego le dieron una bofetada!

Esa niña sonaba genuinamente indignada, pero me importaba muy poco cómo ella se sintiera. Porque yo…

Yo deseaba destripar a esas estúpidas.

—Francis, toma a mi hermana y llévala de inmediato al carruaje, nos iremos a casa.

El caballero no se veía conforme, podía ver el deseo en sus ojos de castigar a esas niñas él mismo, pero era mi deber representar a mi padre en esta fiesta.

Con cuidado, cargó a mi hermana. Roxanne no decía una palabra y eso me resultaba preocupante, ella era muy conversadora

¿Las palabras de estas brujas en verdad la hirieron tanto?

—Señorita Kalie, será mejor que se vaya con su hermano de manera inmediata.

Al mirar de reojo a la señorita que había estado con mi hermana, ella entendió mi mensaje de forma inmediata. En otro momento eso hubiera sido agradable, pero ahora…

Sólo quiero hacer pagar a estas tres.

—Así que se atrevieron a insultar a la familia Maquielo, a mi familia, a mi pequeña hermana…

Las voy a hacer pagar.

♦ ♦ ♦

En el carruaje, Roxanne estaba sentada junto a mí con su cabeza recostada en mi hombro. Ella era tan pequeña y delicada, si esas niñas hubieran sido muchachos seguramente le hubieran hecho mucho más daño.

No me había dado cuenta hasta ahora lo mucho que ella me necesitaba, era tan pequeña.

—Tranquila, pronto estaremos en casa —le susurré mientras tocaba sus cabellos dorados con cuidado, por un momento la sentí tensa, pero luego, se relajó con mis caricias y sus ojos se fueron cerrando.

Está bien, te dejaré descansar ahora Roxanne… Verás que estarás a salvo cuando vuelvas a abrir tus ojos.